A medida que la vitalidad sexual de la liberación gay de la década de 1970 se afianzó, las personas LGBTQ encontraron la libertad en los espacios relativamente privados de bares, baños públicos, cines porno, parques y salones de té de BDSM. Los encuentros anónimos, el juego consensuado, el código social claro y el tiempo para quedarse crearon una facilidad de comunicación y construcción de comunidad, lejos de la mirada heterosexual. Inherentemente políticos en su vivienda y promoción de la "desviación", estos lugares (y las personas que los frecuentaban) nunca han sido neutrales. Cuando en 1978, Samois, una organización lesbiana S/M recién formada, se declaró "pervertidas radicales", opuestas a todas las jerarquías sociales basadas en la preferencia sexual", se enfrentaron a un duro rechazo por parte de algunas feministas lesbianas que creían que el BDSM era una extensión peligrosa de poder patriarcal. Y el inicio de la epidemia de VIH/SIDA trajo nuevos desafíos, tanto dentro como fuera de la comunidad LGBTQ, a la validez de los sitios con carga sexual y a su responsabilidad con la salud pública si se les permite permanecer en funcionamiento. Sin embargo, los activistas pro-sexo y los amantes del cuero reconocieron el profundo valor que muchos sentían en la conexión con esos espacios y comenzaron a utilizarlos para desarrollar ideas innovadoras en torno al sexo más seguro, la organización de ayuda mutua y la educación sanitaria. Si bien la mayoría de los bares, baños públicos, cines porno y salones de té de esa época han cerrado sus puertas, se consideran sagrados por el amplio espacio que crearon y las acciones revolucionarias producidas dentro de sus paredes.
Durante más de una década, Alexis Heller trabajó para empoderar a los jóvenes LGBTQIA+ en entornos como hogares de acogida, refugios para personas sin hogar, centros de acogida y escuelas. Comenzó una práctica curatorial independiente en 2012 centrándose en las historias feministas y LGBTQIA+ marginadas. Heller ha organizado exposiciones para instituciones como el Museo de Arte Leslie-Lohman, Smack Mellon, The 8th Floor, The Handwerker Gallery en Ithaca College, así como varios espacios de arte alternativo. Actualmente vive entre Nueva York y Costa Rica.
Alexis Heller
Laura Metzler, Gerente de Exposiciones y Curaduría
Kayla Janaé Smith, asistente de proyectos curatoriales
Eunice Yun Jeong Lee
Cletis Chatterton
Winston Forgenie Jr.
edgar samudio
cabestro de allison
Flores Pintura
John Freeman
Kay Torres
Sara Sciabbarrasi